Terror en la escuela

Lo que a continuación les voy a contar es algo que me marco fuertemente y que es de las causas por las cueles me siento fascinada por los temas paranormales.

Tenía 7 años pues iba en primero de primaria, un día como cualquier otro pasó un suceso paranormal el que no solo yo lo viví pues también lo presenciaron mis compañeros de salón y todos los alumnos de la escuela primaria que acudieron a clases ese día; las clases comenzaron con normalidad pero fue en la hora del receso que comenzó a tornarse un ambiente extraño, mis amigas y yo estábamos jugando a perseguirnos por los pasillos y las jardineras de toda la escuela hasta que llegamos a la parte trasera de los salones de los grados mayores, cuando llegamos justo detrás del salón de sexto año vimos que se encontraban unas niñas de sexto y unas más de grados menores incluso una de mis compañeras de primer año. 

Al ver que estaban muchas niñas nos acercamos a otras niñas que estaban viéndolas desde lejos y les preguntamos ¿Qué están jugando? a lo que ellas nos respondieron “la Tabla Ouija” y nos contándonos para que serbia, mis amigas y yo nos quedamos un tanto pensativas pues no lo entendíamos en su totalidad pero nos quedamos mirando un rato; el grupo de niñas que se encontraban jugando de una manera extraña estaban cantando la canción de “La Muñeca” que dice algo así (Brinca la tablita, yo ya la brinque, bríncala de nuevo yo ya me canse) eso cantaban mientras brincaban sobre la tabla Ouija, se nos hiso muy macabro por alguna razón y nos fuimos de ahí.

El problema se presento después del receso, pues los maestros tenían junta por lo que dejaron trabajo a los grupos para hacer en su ausencia, estábamos todos en el salón “realizando el trabajo que dejo la maestra” cuando una niña que había ido al baño regreso corriendo muy asustada y nos dijo que algo raro estaba pasando pues no la dejaban salir del baño, y cuando logro salir no había nadie, cuando acabo de contar lo que le había pasado comenzó lo mas terrorífico que eh vivido, pues se comenzó a escuchar como alguien caminaba, corría, brincaba encima de todos los salones siendo estos de una sola planta y no contar con alguna escalera para subir al techo, las ventanas comenzaron a temblar, menos en el salón donde estaban los maestros, claramente no era un temblor, pues si hubiera sido eso hubieran ido a sacarnos del salón, pero ningún maestro se apareció en el salón ni en los salones vecinos.

Todos los niños nos concentramos en medio del salón subiéndonos encimas de las butacas abrazándonos, todos estamos ahí menos la niña que estaba jugando la tabla Ouija con las de sexto, estábamos aterrados pero lo que más nos aterro fue que comenzaron a tocar la puerta que estaba cerrada, ahí fue que con mi mejor amiga de ese entonces y otros niños caminamos abrazándonos para ir a ver por la ventana quien estaba tocando, la sorpresa fue ver que no había nadie fuera y seguían tocando, volteamos a ver a los demás del salón y cuando les dijimos que no había nadie un niño comenzó a llorar y a pedir a su mamá, su mejor amigo lo abrazaba e intentaba consolarlo, otras niñas permanecían abrazadas llorando, nosotros nos acercamos de nuevo al grupo y nos subimos a las bancas.

Esto duro unos cinco minutos y cuando termino unos niños salieron corriendo hacia el salón de maestros, al igual que otros niños de otros grupos y grados que fueron a avisar de lo que había ocurrido extrañamente en todos los salones, los niños no tardaron en delatar a las niñas que estaban jugando la tabla Ouija en el receso y que cuando los maestros se fueron a junta se habían vuelto a juntar para seguir jugando, la niña que había llevado la tabla era foránea del pueblo y fue la primera en ser expulsada junto con otras de sexto, después expulsaron a otras de más grados y a mi compañera que era vecina de la dueña de la tabla.

La escuela después de eso quedo en total tranquilidad, como si no hubiera pasado nada y nunca mas paso algo paranormal.

No sé si fue sugestión por lo que vimos que se formo una histeria colectiva, aunque no todos vieron a las niñas jugando, pero toda la escuela lo vivió, y con mis primos que son mayores dos años en ocasiones recordamos lo sucedido coincidiendo con los sucesos paranormales que viví. 

¿Ustedes han vivido algo parecido?

¿Jugarían la tabla Ouija?

Con cariño la Bruja